Ni en una mala pesadilla al comisionado Adam Silver se le habría pasado por la cabeza tener unos playoffs sin los Lakers y los Nets, pero hace tiempo que es una posibilidad real. Los angelinos son undécimos en la Conferencia Oeste y, a falta de cinco encuentros, estarían fuera del play-in. Los de Brooklyn son décimos en el Este. Situaciones impensables cuando al inicio de la temporada los dos equipos eran favoritos al anillo y la NBA se relamía con una posible final entre ellos. Ahora se cierne una debacle sobre ella.
Porque pese a que la temporada regular ha demostrado que hay grandes equipos, mucho mejores que los citados, con sus estrellazas, pocos tienen el interés mediático de los Lakers y los Nets, ubicados en ciudades con enormes mercados, construidos a base de acumulación de talento y con dos de los mejores jugadores de la historia, que han firmado temporadas sensacionales... a nivel individual. LeBron James, con sus 37 años, es el máximo anotador de la NBA (30,3 puntos de media ) y Kevin Durant sería segundo (30,1, igualado con Giannis Antetokounmpo) si hubiera disputado los partidos necesarios para computar en la estadística.
Los Lakers tienen cinco partidos para intentar meterse en el play-in. Con un balance de 31-46, están a un partido de los Spurs, décimos. Ya con Lebron y el recuperado Anthony Davis, aseguran que es posible ganarlos todos. No les resultará sencillo. Han de medirse dos veces con los Nuggets, que intentan acceder directamente a los playoffs, y otra con los Warriors, que pelean por la tercera plaza. También han de medirse a los Suns, que tienen el liderato garantizado, y a los Thunder, ya desahuciados.
El drama para los Nets puede venir después. Tienen segura una plaza en el play-in, pero van a tener que ganar al menos un partido para poder disputar los playoffs. Son décimos y tendrían que escalar a la séptima (casi imposible) u octava plaza que ahora ocupan los Hawks para jugar sólo una 'final'. Si la ganaran, estarían dentro. Si acaban novenos o décimos, tendrían que vencer dos encuentros antes de llegar a las eliminatorias por el anillo. Y a un solo partido, ya ha quedado demostrado que puede pasar cualquier cosa.
En un par de semanas, a la NBA se le pueden caer dos de los equipos más mediáticos, dos de los que, a principio de temporada, todos imaginaban luchando por el título en unas finales con grandes audiencias. Las lesiones y los problemas de adaptación de las estrellas han hecho que el curso de ambos haya ido por otros derroteros. Ahora se asoman al abismo.
Los Warriors se aseguraron una plaza de playoffs. No tienen a Stephen Curry, al que esperan para las series por el título. Pero tienen a Jordan Poole, cuyo salto esta temporada ha sido extraordinario hasta convertirse, en ausencia del base, en la nueva pareja de Klay Thompson en los 'Splash Brothers'. Ha pasado de los 20 puntos en los últimos 16 encuentros, en los que promedia 26,6 con un 45,0% en triples. En el triunfo sobre los Jazz (111-107) Thompson acabó con 36 puntos y ocho triples. Poole metió 31 con seis aciertos desde el arco. Los dos fueron protagonistas en un decisivo parcial de 18-0... con seis triples seguidos que hundieron a los Jazz. Los de Utah han perdido ventajas de al menos 20 puntos en dos partidos consecutivos.
Los Heat parecen haber superado el mal rato que paso hace una semana, cuando sufrieron cuatro derrotas seguidas y hubo un duro enfrentamiento en un tiempo muerto entre el entrenador Erik Spoelstra y la estrella del equipo Jimmy Butler. No es fácil olvidar un suceso así, pero en Miami lo han hecho o al menos lo están disimulando. Suman tres victorias consecutivas, la última ante los Bulls (109-127), y están cerca de asegurarse el liderato en la Conferencia Este. Butler anotó 22 puntos y Kyle Lowry llegó a los 19 y 10 asistencias.
Para ser los mejores hay que ganar a los mejores y eso es precisamente lo que no están haciendo los Bulls, cuyo balance con los ocho mejores clasificados es de 2-19. En la visita de los Heat volvieron a flojear pese a los 33 puntos de Zach LaVine, los 26 de DeMar DeRozan y el doble-doble (12+10) de Nikola Vucevic.
Juancho Hernangómez se ha hecho fuerte en la rotación de los Jazz. El alero español aprovechó hace un par de semanas de Bojan Bogdanovic para ganarse minutos e incluso ser titular en siete partidos. Ahora suma 10 encuentros seguidos jugando. Ante los Warriors disputó 16 minutos y acabó con cinco puntos, tres rebotes, una asistencia y una recuperación.
0 Comments